Para mantener una pradera de césped cuidada y sana es indispensable hacer un escarificado y recebado. Esto se hará al menos una vez al año, en primavera, con esto eliminaremos los residuos orgánicos que se van acumulando en el césped, aireando el suelo y permitiendo el buen desarrollo de las raíces, algo fundamental para que el desarrollo aéreo de la planta sea correcto.
Esta tarea se hará con la escarificadora, máquina que corta la grama y rompe la capa dura superficial del césped y permite que el aire penetre en el mismo. Después procederemos con el recebado, que está compuesto por una mezcla de sílice y sustrato universal que se esparcirá por toda la superficie mejorando la estructura del suelo. Una vez extendida y rastrillada la capa sólo tendremos que esperar unos días para ver como recupera su vigor.